Subtipologías de Asesinos Múltiples: Asesinos en Lugares de Trabajo (workplace killers) 2da. parte

En cuanto al perfil de un asesino en lugares de trabajo:
1) Exhiben, típicamente, algunas de las siguientes características:
• Por lo general se trata de hombres en un 80% aproximadamente.
• Son de mediana edad, dentro de un rango entre 35 y 45 años.
• Es muy probable que posean un historial de violencia doméstica, dificultades legales, conflictos con sus colegas o rechazos en sus intentos de relacionarse emocional o sexualmente.
• Difícilmente socializan; tienden a ser personas solitarias; su autoestima está directamente relacionada con el trabajo aunque no sea de buen rendimiento. Es el tipo de persona que “necesita una vida”.
• Son proclives a tener obsesiones o fijaciones con personas, ideas o sucesos como, por ejemplo: causas políticas, raciales o religiosas; actos de violencia; sus empleos; otras personas, etcétera.
• Tienen obsesión y/o fascinación por las armas de fuego; poseen, al menos, una de ellas.
• Poseen una frustrante historia de vida y/o experiencias laborales fallidas (cambios continuos de empleo).
• Son narcisistas, desprecian al resto y no aceptan críticas; su humor es inestable o escaso;
• Exhiben fascinación por los grupos militares, de las fuerzas del orden, organizaciones de supervivencia o de base fascista, entre otras.
• Poseen un historial de abuso de alcohol o drogas (2/3 del total de este tipo de atacantes).
• Expresan un gran interés en temas o actos violentos informados por los medios de comunicación, tales como los asesinatos múltiples, aplicación de la pena de muerte, etcétera.
2) Exhiben ciertos signos potenciales de advertencia que, en muchos casos, coincidirían con la probabilidad o certeza del sufrimiento de alguna enfermedad o algún trastorno mental:
• Se comportan en forma hostil o amenazante con sus compañeros (elevan la voz, intimidan, amenazan); también sufren un incremento en sus problemas domésticos o en su desempeño laboral.
• Actúan en forma “extraña” o errática: deterioro en su higiene y cuidado personal, se recluyen del resto, se tornan paranoicos y desorganizados.
• Muestran problemas emocionales, generalmente, depresión, ideas “conspirativas”, comportamientos autodestructivos, entre otros.
• Con asiduidad, entran en conflictos con sus superiores o sus compañeros.
• Presentan quejas y agravios, victimizándose, culpando a otros, y se muestran siempre contrariados.
• Sus compañeros sienten que esta persona puede “estallar” en cualquier momento y les genera temor.
3) Eventos disparadores del comportamiento de un asesino en su lugar de trabajo:
• Pérdida o suspensión en su trabajo;
• Se lo “ignora” en promociones o ascensos que “cree que le corresponden”;
• Aplicación de sanciones disciplinarias;
• Problemas financieros personales;
• Crisis personales: rupturas sentimentales, muerte en la familia, conflictos domésticos, entre otras.
• Conflictos interpersonales y/o continuas disputas relacionadas con el trabajo.
Se ha descubierto que muchos de los atacantes de sus compañeros de trabajo y/o supervisores suelen sufrir de desórdenes de personalidad, tales como psicopatías graves (esquizofrenia, trastornos psicopáticos paranoicos); personalidades explosivas o agresivas; mente criminal y delirios de persecución o conspirativos en su contra; personalidades borderline y/o trastorno de bipolaridad.
Los individuos con esta clase de desórdenes y/o problemas mentales pueden estallar cuando experimentan algún factor de ansiedad personal, tales como una separación o divorcio, pérdida de trabajo, problemas de salud, financieros o de cualquier índole, que sienten que “amenazan” su sentido de control personal, o por causa de sus propios delirios y alucinaciones. Dependiendo, entonces, del control que el empleado tenga sobre sí mismo, puede no demostrar síntoma alguno de la furia que va creciendo en su mente, cada vez más intensa y simbólica. Se siente incapaz de resolver estos dilemas, el resentimiento y la ira hacen que esta persona colapse ante el más mínimo incidente, como puede ser que un compañero, por equivocación, tome algo de su escritorio, o que un superior le haga notar alguna pequeña falla en su trabajo.
FUENTE: García Roversi, Susana P., Asesinos Múltiples 1, Colección “Sin Piedad”, vol. 1, Grupo Editorial HS, Buenos Aires, 2010.

2 comentarios:

  1. Caramba! El único requisito que no cumplo es ser mujer. No se lo pase a mi dr! ( Bueno, yo le pasé un detalle parecido cuando me mandó a leer su diagnóstico x Internet). Realmente si lo fuera ( me considero polidiagnosticada), no estarían en condiciones de advertirlo. Sigo leyendo. Saludos Dra.!

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    1. Hay un"cupo femenino" de un 20%... ojo!!! Saludos y bienvenida al blog!!!

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